sábado, 24 de diciembre de 2011

EN EL AIRE

Una melodía que es capaz de unir corazón, mente y espíritu
Una melodía que despierta los más profundos y latentes sueños.
Una melodía que cuida la realización de los más intrépidos anhelos.

Esa melodía se encuentra suspendida en el aire.
Como un magnífico arquetipo que por momentos pone a nuestra alma de puntillas y con una inmensa sonrisa en el rostro, mientras la mayor parte del tiempo sufre por no encontrar la melodía que sea capaz
de hacerla feliz a ese punto y que además llora porque el resto de almas ni siquiera está interesada en su búsqueda y se conforma con rezagos de ruido, que a duras penas se llama "música" con lo cual esta última experimenta una fuerte sensación de enfado, por ser comparada con tan poca y vana cosa.

Esa melodía se encuentra suspendida en el aire.
Sólo algunos la reconocen, la saludan con increíble felicidad, como quien encuentra lo que tanto buscaba y la acogen para que nunca más se vaya de su lado, mientras que otros continúan conformándose con la inútil imitación de sus finos y delicados tonos, entre los cuales no existe el más mínimo punto de comparación.

Esa melodía se encuentra suspendida en el aire.
Y sólo las musas la poseen y la brindan como el más preciado regalo a quienes saben apreciarla en su justa medida.

Esa melodía proviene del Cielo, de lo Celeste y sólo los Ángeles y Arcángeles son capaces de cantarla con magistral maestría, con suma delicadeza y con perfecta agudeza.

Esa melodía es capaz de cautivar a aquellos que se encuentran en su búsqueda.
Esa melodía es capaz de anidar en el Espíritu de los más nobles corazones.
Esa melodía es sólo para los que son capaces de amar profundamente y de aspirar a los más nobles Ideales de Humanidad y Trascendencia.

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